Hinchas y futbolistas de Boca Juniors destrozan varias partes de la Bombonera 1992 (informe especial)

Así lucía el Estadio Alberto José Armando doce horas después de los "festejos" del Apertura 1992

- Hartos de que relacionen al Club Atlético River Plate con la segunda división del fútbol argentino sin conocimiento de causa, en Expediente River nos irritamos y nos vimos en la obligación de mostrarles la cruda realidad a los hinchas de Boca Juniors: En 1949 la AFA impidió que descendieran beneficiándolos de múltiples formas, y hasta intentando reestructurar el Campeonato Nacional de ese año. Vergonzoso. A diferencia de ellos, a nosotros nos gusta el buen fútbol y no somos ignorantes hinchas de la hinchada. Tenemos materia gris. Pero lógicamente algunas cosas molestan. Cuando en medio de una discusión, nos intentan atacar diciendo “Gallina vos rompiste tu cancha”, es por un simple motivo: se quedaron sin argumentos deportivos para debatir. Pero nosotros nos metemos en cualquier terreno en que haya que defender a nuestra gloriosa institución. Llámese club, o gente. ¿Quieren jugar a descubrir muertos en el placard? ¡Juguemos entonces!

20 de diciembre de 1992, Estadio Alberto José Armando. Un clima de nerviosismo y miedo invadía a los hinchas xeneizes que ingresaban a la Bombonera para vivir "la final" del Apertura 1992 entre Boca Juniors (protagonista) y San Martín de Tucumán (actor invitado). Con un empate, el equipo que dirigía el Maestro Tabárez se aseguraba el título y cortaba la racha de 11 años de virginidad a nivel nacional. Increíblemente el cotejo lo comenzó ganando San Martín 1 a 0 con gol de Ricardo Solbes a los ‘19. En el entretiempo, el grueso de la hinchada de Boca ingresó al vestuario visitante para proponerles una interesante oferta a la delegación tucumana: el empate, por sus vidas. Antes de regresar a sus ubicaciones, la parcialidad boquense realizó una escala en el vestuario local para brindarles a los futbolistas xeneizes una polémica charla, que como reconocieron varios presentes en ese momento, fue mitad aliento, mitad apriete. En el segundo tiempo, con gol de Claudio Benetti, Boca Juniors logró el empate y se consagró campeón del Apertura.

Tapa del Diario Popular correspondiente al 21 de diciembre de 1992

Cuando Francisco Lamolina dio el pitazo final, comenzaron los festejos. Con varios hinchas ya colgados en el alambrado de Casa Amarilla tratando de saltar al campo de juego, algunos futbolistas llegaron para sumarse al festejo. Así fue como Márcico tomó la iniciativa y empezó a treparse. Al ‘Beto’ lo siguieron otros y el alambrado se llenó de gente shockeada colgada de ambos lados. Pero enseguida empezó a vencerse y en cuestión de segundos cayó para el lado del pasto. Era entendible, puesto que hacía tanto tiempo que no se consagraban campeones nacionales, que lógicamente no recordaban cómo celebrar civilizadamente. El peso que ejercieron entre todos, venció a la división de alambre, que se derrumbó sobre uno de los arco. Los hinchas y futbolistas de Boca Juniors habían destruido una parte de la Bombonera.

El travesaño del arco detuvo la caída del alambrado y los que estaban colgados del lado de la cancha pudieron amortiguar su aterrizaje. Se escuchó un “uhhh...” de todo el estadio e inmediatamente un silencio que presagiaba lo peor. Tras unos instantes de corridas y primeros auxilios sobre la propia área grande, se pudo ver a Giuntini con sangre en un ojo y saliendo en camilla pero levantando su mano en señal de que estaba bien. Varios nos acusaron diciendo que el alambre se cayó por la presión de la gente en la avalancha del gol de Benetti. Falso.

Gol de Claudio Benetti a San Martín de Tucumán

Claudio Benetti festeja su gol colgado del alambrado. Pero este no se cayó

Video de la caída del alambrado del Estadio José Armando

Alambrado destruido por completo en los descontrolados festejos dentro del estadio

Fotografía de Alejandro Giuntini con un profundo corte en la ceja

No va a faltar el comentario del hincha de Boca Juniors diciendo: "La división se rompió festejando". Eso es relativo. Ustedes se mofaron diciendo que los hinchas genuinos de River Plate habíamos roto el alambrado de las tribunas el día del descenso frente a Belgrano de Córdoba. Cuando en realidad se rompió involuntariamente cuando casi todos los riverplatenses presentes ese día (minutos después de haber descendido) se colgaron del mismo para insultar a Pezzota, y a los futbolistas visitantes. Pero también para entonar unánimemente un "Soy de River, soy de River, de River, yo soy..." estremecedor.

Así que si vamos a hablar de romper los alambrados, voluntariamente o no, estamos iguales. Pero la destrucción xeneize no fue solo contra el pobre alambrado (?). Antes de dirigirse al mítico Obelisco de Buenos Aires para realizar los festejos más significativos del Apertura ’92, bajo la "euforia" de ser campeones,  los hinchas de Boca Juniors arrojaron un centenar de piedras al campo de juego y rompieron el 90% de los carteles publicitarios de las tribunas. Y como si todo esto fuera poco, la parcialidad boquense destrozó impunemente los baños y demás instalaciones de la Bombonera. ¿Eso es festejar?

Estos son los baños de la Bombonera que en 1992 fueron destrozados por los propios hinchas de Boca Juniors

Estos son los baños de la Bombonera que en 1992 fueron destrozados por los propios hinchas de Boca Juniors

Seguramente usted, que es hincha de Boca Juniors y está leyendo esto, debe pensar que somos grandes mentirosos porque no contamos con pruebas fehacientes que nos avalen. No se apresure a sacar conclusiones...

En este estado se encontraba la Bombonera, doce horas después de la inolvidable destrucción

Nuestra prueba más grande es este excelente material del "Archivo Difilm" de una nota de ATC a Omar Toti (Intendente del Estadio Alberto José Armando), sobre los destrozos provocados por los propios hinchas de Boca Juniors en su casa. Claramente en 1992 la parcialidad xeneize no sabía festejar correctamente, a tal punto que rompieron su propio estadio. Pero en 2012 y 2013, demostraron que existe la involución.

Pasan los años, siguen los fracasos,  y los hinchas de Boca rompen todo a su paso

Seguramente esos mismos que acusan al hincha de River de "romper" el Monumental, son los mismos que destrozaron los baños de la Bombonera en el '92, los que destruyeron Mc Donald's y pintaron el obelisco en 2012, y también aquellos que cometieron la aberración de quemar una réplica de la honorable bandera nacional argentina en 2013. Las mentiras que los hinchas de Boca instalaron en la sociedad contemplados por los medios, son demasiadas. Pero Expediente River se va a encargar exclusivamente a desenmascarar a estos personajes, y a derribar todas sus falacias. Pero siempre con la verdad y proclamando la rica historia riverplantense. Esto recién comienza...

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